martes, 5 de diciembre de 2006

De ocurrencias



Desde un tiempo acá tengo la sospecha de que en lugares recónditos de cada una de nuestras administraciones existe una unidad que oculta a relaciones de puestos de trabajo, organigramas y presupuestos, sirve con dedicación y esmero de autentico semillero de toda suerte de ideas, las mas de ellas peregrinas, claro está, tal servicio, departamento o lo que sea, presentada la ocasión y en ocasiones aún sin presentarse, ofrece su contribución al político al que con todo su celo sirven. Sí las predicciones meteorológicas amenazan mal tiempo, Gallardón ofrece como solución a los automovilistas, la inclusión en el equipo de emergencia, de un pañuelo rojo junto con las cadenas y el móvil, el propósito de tan extraña sugerencia es de que sea atado a la antena del coche, para que si por azares de la ventisca, nuestro vehículo es sepultado bajo la nieve, sirva como baliza de emergencias que guié a los equipos de rescate mandados en nuestra ayuda. Sí la sequía además de ser pertinaz se pone pesada, pues ya está, Esperanza bombardeará las nubes con no se que producto, después de haberlas colocado, eso si, sobre las zonas de interés, et viola, problema resuelto. Sí los acuíferos se nos vacían, a base de tanta extracción incontrolada, tanto campo de golf o tanto “desarrollo”, pues se les rellena, ¿fácil verdad?, como decía el inefable Holmes, elemental mi querido Watson. Menuda es nuestra Presidenta.

La lista de tales perlas es desde luego mucho mas larga y justamente por esa razón, sería buena idea que algún equipo de eruditos se encargara de recopilar tamañas idioteces en una especie Enciclopedia de la Ocurrencia, que sirviera para ilustrar futuras generaciones de políticos y de paso evitara que llevados, tales servidores públicos, de exceso de celo entablaran crueles batallas por la autoría de esta o aquella agudeza.

Estos departamentos, que tan buenos servicios prestan al Sr. Galladón y la Sra. Aguirre, y no solo a ellos, no vayan ustedes a creer, no han surgido de la nada, ni mucho menos, entroncan directamente con nuestro mas florido pasado, debió ser, a buen seguro, el celebre profesor Fran de Copenhague con su sección dedicada a los Grandes Inventos de TBO, quien inspiró la creación de esos verdaderos templos de la inventiva, tanta imaginación e inteligencia junta, no es sencillo de concentrar, ni de aguantar.

Esperar, esperando a Esperanza

Realmente lo de Esperanza Aguirre es de antología, esta señora que en su etapa como concejala del Ayuntamiento de Madrid lo mas sobresaliente de su gestión fue su empecinada lucha con el entonces Consejero de Transporte Sr. Revenga a cuenta de la tala de unos árboles en las proximidades de la estación del Norte y por el contrario calla las atrocidades que se están cometiendo en los alrededores de la M-30, que en su etapa como ministra de Educación Cultura y Deportes dio sobradas muestras de su incapacidad e insolvencia, hasta el extremo de que Aznar la cesó “desterrándola” a la Presidencia del Senado, recordar la anécdota de Sara Mago, que accede a la presidencia de la Comunidad mediante los procedimientos que todos recordamos, que es capaz de emprenderla a mamporros hasta contra su propio conmilitón el inefable Gallardón, que ha sido capaz de cometer los mas atroces ataques contra la veracidad usando su canal privado de televisión que pagamos todos y para colmo de los colmos, se permite aspirar a la Presidencia del gobierno de España. ¡Dios nos libre!.